Préstamos para Negocios: cómo conseguirlos
Si buscas un préstamo para tu negocio, en este artículo te contamos todo lo que tienes que saber al respecto. Desde los tipos de préstamos para negocios que existen, hasta cómo solicitarlos, pasando por los requisitos que deberás cumplir, la documentación que tendrás que aportar... También puedes entrar en nuestro simulador de préstamos y, en solo 2 minutos, obtener la tu oferta de préstamos personalizada.
Cuando hablamos de préstamos para negocios nos estamos refiriendo a aquellos créditos pensados para sufragar los gastos asociados a la apertura de un nuevo negocio, o a la ampliación de uno existente. Y es que empezar una nueva actividad económica o expandirse puede requerir de una inversión sustancial.
Para tal fin existen diferentes mecanismos de financiación, cada uno de los cuales nos resultará más beneficioso según sea nuestro caso, nuestro tipo de negocio, y más. De hecho, no implicará los mismos gastos la apertura de una tienda online, que la expansión a diferentes territorios de un negocio ya existente (y ya de por sí grande). Otros casos que pueden darse es que necesitemos el dinero para pagar a proveedores, hacer reformas en el local, afrontar un imprevisto, etcétera.
Tampoco será lo mismo que el préstamo lo solicite un autónomo como persona jurídica a que lo haga una compañía a nivel internacional, o una gran empresa. En cualquier caso, en este artículo nos centraremos en los negocios pequeños y medianos, para no eternizarnos. Más adelante podrás consultar nuestro artículo sobre préstamos para empresas.
Dado que la cantidad y otras necesidades de financiación son diferentes según el caso, también existen diferentes tipos de préstamos para negocios. Resumimos algunos de los más comunes:
Préstamo personal para negocio
Una de las vías de financiación para negocios más habituales son los préstamos personales o préstamos para empresas. Se trata de préstamos al consumo específicos para particulares o compañías que cuentan con condiciones específicas. Las cantidades a las que se suele acceder con ellos no suelen superar los 40.000 o 60.000 euros, pero todo depende de la entidad en cuestión, del perfil de solicitante y otros factores igualmente importantes.
En cuanto a su coste, suelen tener una TAE del 8% y normalmente aplican ciertas comisiones como la de apertura. También pueden tener productos vinculados que acabarán encareciendo el precio de que nos presten dinero.
Microcrédito
Más que para grandes compañías, los minicréditos y microcréditos están pensados para negocios ya existentes, no demasiado grandes, que tienen una necesidad puntual. Esta puede ser pagar a proveedores, renovar los equipos informáticos de unos pocos trabajadores y similares.
¿Por qué? Básicamente porque las cantidades a las que se puede acceder con ellos no superan los 1.000 euros, por regla general. También podrían servir, por ejemplo, si lo que queremos es montar un nuevo negocio online: cubriría los gastos del dominio, los de los ordenadores, etcétera. Pero poco más.
Eso sí, una de las grandes ventajas de estos créditos es que, si necesitas dinero de forma urgente, son un producto ideal. Su tramitación suele ser muy rápida: la solicitud es eminentemente online y los tiempos de respuesta pueden ir desde los pocos minutos hasta las 48 horas. Pero no suelen alargarse más. Eso sí, suelen contar con honorarios, más altos que los intereses de un préstamo al uso. Están pensados para responder a necesidades puntuales de tu negocio.
Tarjeta de crédito para el negocio
Con la tarjeta de crédito, normalmente, tampoco puede accederse a grandes sumas de dinero (aunque depende de cada caso). Pero son una buena vía de financiación para negocios que, como en el ejemplo anterior, tienen que cubrir una necesidad urgente o no necesitan demasiado dinero para empezar. Permiten acceder al dinero a crédito y devolverlo (por regla general) a final de mes sin que esto genere intereses.
Además, casi todo el mundo tiene una tarjeta de crédito. Si no es el caso, que nos concedan una puede alargarse hasta un mes. Pero cuentan con muchas ventajas: son un método de financiación flexible, suelen ofrecer buenas condiciones, cuentan con seguros asociados por pérdida o fraude, con sistemas para limitar el gasto, etcétera.
Préstamo para negocio rápido
El préstamo rápido es un producto muy parecido al minicrédito (de hecho el minicrédito puede considerarse un préstamo rápido). La principal diferencia es que con el préstamo rápido podremos conseguir hasta 15.000 euros –a grandes rasgos, pues cada entidad puede poner sus propios límites–.
La horquilla de tiempo en la que se tarda en obtener el dinero va de los 15 minutos a las 48 horas. Y los plazos de amortización también suelen ser más breves. En cuanto al coste de estos préstamos, suelen aplicar intereses más altos, por eso son recomendables ante necesidades urgentes que surjan en nuestro negocio. Y no como vía de financiación recurrente.
Línea de crédito para tu negocio
La línea de crédito es una vía de financiación frecuente entre aquellos que inician un negocio. Se trata de una modalidad un poco diferente al resto de préstamos para negocios.
Con la línea de crédito el banco pone a disposición del cliente una cantidad concreta durante un tiempo concreto también. La diferencia está, justamente, en el “poner a disposición”. Esto significa que, si no lo necesita, podrá no usarlo. Y lo contrario. El cliente, además, solo pagará intereses por la cantidad que gaste (normalmente). Se trata de una opción muy conveniente por su flexibilidad, y porque ofrece liquidez constante.
Pero pongamos un ejemplo para comprender mejor la línea de crédito para negocios: la entidad concede 15.000 euros durante el plazo de un año. El cliente no toca el dinero en tres meses y, consecuentemente, está tres meses sin pagar intereses. Pero al cuarto tiene un imprevisto de 6.000 euros y lo usa. Entonces abonará intereses por este importe. Además, le quedarán 9.000 euros que, si no usa, irán aumentando según pague los 6.000 que debe (y los respectivos intereses).
Préstamo para negocio con garantía hipotecaria
Los préstamos con garantía hipotecaria son préstamos cuyo titular responde con una garantía, normalmente una vivienda, en caso de impago. Esto implica que, si no abona las cuotas correspondientes en los términos y plazos establecidos en el contrato, podrá perder esta garantía.
Y puesto que el banco o la entidad querrá asegurarse de que recuperará el dinero, las cantidades a las que se podrá acceder con este producto dependerán, directamente, del valor de la garantía. O sea, cuanto más dinero cueste la vivienda (o el bien que se ponga como aval), a más capital será posible acceder. Eso sí, esta propiedad deberá estar libre de cargas o pagada en un 80%. Además, no podemos perder de vista el riesgo que conlleva esta modalidad de financiación si nuestro negocio no va bien y no podemos pagar. También suelen aplicar intereses más elevados que los préstamos personales.
No obstante, también tiene ventajas sustanciales: los préstamos con garantía hipotecaria cuentan normalmente con plazos de devolución bastante flexibles y servicios de carencia (por ejemplo, que no empieces a pagar intereses hasta pasado un tiempo, algo interesante si estás empezando un negocio).
Hipoteca para local comercial
No podemos olvidar los préstamos hipotecarios, muy convenientes cuando lo que necesitamos es comprar un local para expandir el negocio o empezar la actividad. En estos casos es posible contratar una hipoteca específica (te recomendamos que uses nuestro comparador de hipotecas para encontrarla). Esta modalidad de financiación suele cubrir el 70% del valor de tasación de la propiedad que se quiere adquirir.
En cuanto a los plazos de amortización máximos, suelen ser de 15 años y, habitualmente, no es posible contratarlos sin productos vinculados.
Otros requisitos que podría pedir el banco o entidad financiera son que hayamos tenido unos ingresos de 9.000 euros en los últimos tres meses, que domiciliemos los pagos de la Seguridad Social, que presentemos las nóminas de los trabajadores (si los tenemos) y demás.
Los requisitos de los préstamos para negocios pueden variar según la entidad, pero también en función de si eres autónomo o ya tienes una empresa. Analizamos los más frecuentes:
- Tener unos ingresos anuales suficientes para pagar el préstamo.
- Disponer de una propiedad inmobiliaria que actuará como garantía o aval.
- Si eres una empresa, es posible que para conseguir un préstamo para tu negocio, el banco te pida que esta tenga cierta antigüedad. Este período es habitualmente de tres años. Aunque depende de cada situación en particular.
- También pueden solicitarte que lleves siendo cliente de la entidad durante al menos un año.
- Si eres autónomo, lo habitual es que te pidan que lleves al menos seis meses siendo cliente del banco o entidad financiera.
- Asimismo, es importante que el negocio tenga su sede fiscal en España, puesto que los créditos a los que accederás aquí están regulados por las leyes nacionales, como es lógico.
- No aparecer en ASNEF ni RAI, tanto si somos particulares como un negocio ya consolidado. Las empresas y particulares que estén en ficheros de morosidad lo tendrán más complicado a la hora de obtener un préstamo para negocio.
- No superar el nivel de endeudamiento óptimo: la capacidad de la persona o compañía que solicita el préstamo no solo está condicionada por sus ingresos, sino por sus deudas. El nivel de endeudamiento no deberá ser superior al 35%.
Es clave señalar que estas condiciones podrán ser más o menos estrictas según donde acabemos solicitando el préstamo. De hecho, podemos encontrarnos con requisitos adicionales a los citados en este apartado.
Para acreditar todo lo anterior, deberás aportar una serie de documentos. Estos papeles pueden variar según sea el caso, la entidad, la cantidad de dinero que solicites y mucho más. Pero existen algunos que son habituales:
- DNI o NIE en vigor del solicitante o solicitantes, esto es, de las personas que necesitan el préstamo para montar el negocio.
- En caso de que la empresa ya se encuentre en funcionamiento y lo que queramos es ampliar el negocio, la última declaración del pago del Impuesto de Sociedades. En caso de ser autónomo, la última declaración de la renta, el justificante de alta de autónomo y las declaraciones de IVA trimestrales.
- Extracto bancario.
- Si eres autónomo o quieres el préstamo para abrir el negocio, es probable que te pidan la vida laboral.
- Nota simple del Registro de la Propiedad si pones una propiedad como aval.
- Si tienes un avalista, datos de la persona que te avala. Aquí es probable que te pidan más documentación para cerciorarse de que podrá responder por ti si tu negocio falla y no puedes devolver el dinero al banco.
- Documento que justifique la finalidad del préstamo. Esto puede ser el plan de negocio, que merece su propio espacio.
Plan de negocio para pedir un préstamo
El plan de negocio puede ser clave a la hora de conseguir el dinero que necesitas. Por eso, es conveniente que sepas todo lo que debería figurar en él y que le dirá a la entidad el motivo por el que realmente necesitas la cantidad de dinero que vas a pedirle:
- Explicación del proyecto: desde su origen. Qué idea se quiere poner en marcha y qué se requerirá para llevarla a cabo. Lo ideal es que la desgloses lo máximo posible.
- Público objetivo del negocio: el target, explicado con sus necesidades. Se trata del cliente al que va dirigido el negocio o producto. Es clave explicar su nivel adquisitivo y otras cuestiones.
- Estudio de mercado: esto es, de las necesidades del mercado y cómo las cubrirá nuestro producto. Y también el análisis de los competidores actuales o potenciales competidores.
- Estrategia de negocio: de los diferentes departamentos y a distintos niveles. Por ejemplo, el plan de ventas, comercial, el de adquisición de cliente, el de marketing, y más.
- Análisis financiero: en base a lo anterior, calcular lo que costará llevarlo a cabo. Inclusive las futuras inversiones. Es una de las partes más importantes.
Llegados a este punto y aunque inicialmente creas que cumplas con los requisitos para conseguir un préstamo para tu negocio, debes saber que puedes verte ante ciertas dificultades o impedimentos. Para ahorrarte sorpresas desagradables hemos recopilado algunas de las más frecuentes:
Que necesites aportar mucha documentación
Una de las situaciones más engorrosas al solicitar un préstamo de esta clase tiene que ver con la gran cantidad de información que puede pedirte el banco. Entre otros, la declaración de Hacienda de los últimos tres años, la trimestral del IVA, el contrato de alquiler del local, los documentos relacionados con el avalista…
En definitiva: es posible que te pierdas entre el papeleo. Para evitarlo, en Acierto.com ponemos a tu disposición a nuestros expertos acreditados. Resolverán todas tus dudas gratis y sin compromiso.
Que a tu negocio le coman las deudas
En este caso te resultará prácticamente imposible acceder a los préstamos para montar un negocio o a cualquier tipo de financiación similar. Básicamente porque eres moroso y este es el peor de los perfiles para solicitar dinero. La entidad pensará que no vas a devolverlo.
También es posible que tengas deudas porque no te pagan las facturas tus propios clientes. Independientemente del motivo, el banco no lo verá con buenos ojos, pues seguirá pensando que no podrás devolver el préstamo en los términos y condiciones pactados.
Que debas aportar una garantía
También puede ocurrir que el banco te pida que pongas una garantía o aval para concederte el préstamo. Un punto que es posible que no puedas o no quieras cumplir (por los riesgos que implica). En el primero de los casos, es probable que no tengas pagada la casa si eres joven, y el segundo dependerá de tu situación personal. También puede ocurrir que el bien que tengas no sea suficiente para acceder a la cantidad que necesitas para montar el negocio.
Para identificar cuáles son los mejores préstamos para montar tu negocio, además de usar Acierto.com, es conveniente fijarse en los siguientes aspectos:
- El capital que pides es suficiente y se encuentra ajustado: los intereses se aplican sobre el capital en forma de porcentaje. Cuanto más pidas, más pagarás.
- La TAE de tu préstamo: te servirá para hacerte una cuenta de lo que te costará que te presten el dinero. Además de el TIN, tiene en cuenta otros factores como las comisiones y el plazo de devolución.
- Cuántos intereses se generarán: te recomendamos que, antes de firmar, lleves a cabo un cálculo de los intereses del préstamo para tu negocio.
- Cuotas y plazo de devolución: cuanto más alargues el préstamo, menores serán tus cuotas, pero acabarás pagando más intereses.
- Operativa del banco.
- Posibles avales: necesarios para que te concedan el préstamo.
- Posibles productos vinculados: que encarecerán el precio final del préstamo para tu negocio.
- Otras posibles ventajas.
Actualmente podemos encontrar préstamos para montar un negocio en diferentes tipos de entidades. Por ejemplo, podremos optar por un crédito de negocios como los descritos en la banca tradicional, pero también tenemos la posibilidad de solicitar el dinero a prestamistas privados, decantarnos por el crowdlending, etcétera.
Préstamo para negocio en la banca tradicional
Como los descritos en puntos anteriores de este artículo. Se trata de la opción a la que se recurre con más frecuencia a la hora de obtener préstamos para un negocio. Para poder acudir a esta vía de financiación, lo normal es que debamos tener una solvencia económica elevada.
Prestamistas y empresas de capital privado
También encontramos empresas y prestamistas de capital privado que ofrecen créditos para montar una empresa. Normalmente lo hacen a través de Internet, algo que agiliza el proceso notablemente. Actualmente, estas entidades financieras compiten con las entidades tradicionales, no solo en los préstamos para negocios, sino en muchos otros.
Entidades públicas
También podemos recurrir a las entidades públicas para obtener nuestro préstamo. Y aquí no solamente estamos hablando de ayudas o subvenciones estatales y municipales, sino también de capitalizar el paro. Si optamos por esta alternativa, recibiremos el paro acumulado durante los años que hemos trabajado por cuenta ajena. Para obtenerlo deberemos cumplir unos requisitos.
Formas de financiación alternativas
Las plataformas de financiación alternativas, como las de crowdlending, son otra opción. Se trata de plataformas que ponen en contacto a inversores anónimos con los negocios. Tampoco podemos dejar de lado los Business Angels, inversores externos que pueden aportar capital en el negocio. Suelen decantarse por empresas cuya capacidad financiera va de los 25.000 euros a los 250.000 euros.
Los pagarés también pueden ser de gran utilidad para nuestro negocio. Son una forma indirecta de financiación, porque permiten aplazar los pagos.
Resumimos algunas de las claves para conseguir un préstamo de negocio:
- Cumple con las condiciones: los requerimientos citados y la documentación. Cuanto mejor sea tu perfil y más te ajustes a las condiciones de la entidad, más fácil será conseguir el préstamo para tu negocio.
- Aporta un buen plan de negocios: se trata en definitiva del documento que permitirá al banco hacerse una idea de por qué necesitas el dinero y también de si tu negocio tendrá éxito.
- Justifica bien tus ingresos: ya sabes que, en caso contrario, lo tendrás muy difícil para conseguir un préstamo de este tipo. Otras fuentes de ingresos interesantes son los rendimientos de inversiones o las rentas de pisos en alquiler, por poner algunos ejemplos.
- Prepara la documentación con tiempo: para agilizar todos los trámites.
- Compara entre las opciones de diferentes entidades para hacerte una composición de lugar de dónde estás. Y analiza las condiciones de los diferentes préstamos para negocios.
- Ten paciencia: ten en cuenta que el proceso podría alargarse más de lo esperado, pero lo importante es conseguir el dinero para ese negocio ansiado (o para ampliarlo).
Con toda esta información, solo resta pasar a la acción: encontrar los mejores préstamos para negocios. Mejores, por sus condiciones, su flexibilidad y su transparencia: la que caracteriza a todas las contrataciones realizadas a través de nuestra plataforma.
Para contratar, lo primero es comparar. Entra en el comparador de préstamos de Acierto.com y comprueba qué fácil es obtener tu comparativa personalizada en más de 30 entidades. Solo tienes que:
- Indicar para qué quieres el préstamo. En tu caso, podría ser una reforma (del local), obtener liquides, una ayuda al negocio u otros. Elige la tuya.
- Decir cuánto dinero necesitas. Te damos opciones, pero también puedes indicar la cantidad exacta de tu préstamo de negocio, si no está entre ellas.
- Contarnos cuáles son tus ingresos netos mensuales, para comprobar tu solvencia.
- Explicar si eres autónomo o estás en otra situación laboral.
- Contestar sí o no a dos cuestiones muy relevantes: si estás en un ERTE y si estás en un fichero de morosos.
- Aportar algunos datos personales como tu nombre y fecha de nacimiento y facilitar tu e-mail, para que te enviemos al instante la parrilla de resultados, personalizados para tu préstamo de negocio.
Además de obtener una comparativa personalizada de forma ágil y sencilla, si eliges nuestra plataforma para tu préstamo de negocio, todo serán ventajas para ti.
- Tendrás toda la información que necesitas: podrás cotejar tipos de interés, características, ventajas y otros datos relevantes de todos los préstamos de negocio incluidos en tu comparativa.
- Con toda esa información, tomarás mejores decisiones: será fácil detectar el préstamo de negocio más atractivo.
- Ahorrás tiempo y dinero: no tendrás que peregrinar de entidad en entidad. Además, nosotros te ofrecemos siempre las mejores condiciones. Y las más flexibles.
- Ganarás en transparencia: no habrá sorpresas desagradables porque sabrás exactamente lo que firmas, ya que nosotros te lo explicaremos con total claridad.
- Tendrás ayuda gratis: nuestros agentes expertos en préstamos resolverán cualquier duda y te acompañarán durante todo el proceso.
- Contarás con tus propios corredores de seguros: y velaremos siempre por tus intereses, durante toda la vigencia del préstamo. De nuevo, totalmente gratis.
Dicho lo cual, no podíamos dejar de contestar algunas preguntas básicas sobre los préstamos para negocios. Estas son algunas de las que más plantean nuestros clientes:
Necesito un préstamo para abrir mi negocio, pero no tengo ingresos, ¿qué puedo hacer?
Si necesitas un préstamo para abrir tu negocio pero no tienes ingresos (imagina que es precisamente por esto por lo que has decidido emprender), debes saber que los bancos cada vez están dispuestos a correr con menos riesgos. De hecho, que un solicitante no tenga ingresos es algo que suele verse con muy malos ojos. Por eso, los pocos préstamos que encontramos con estas características, cuentan con unas condiciones peores que otros (intereses más altos, comisiones, etcétera).
En cualquier caso, te recomendamos que entres en nuestro comparador para saber cuáles son todas tus opciones. Rellenar nuestro formulario solo te llevará 2 minutos de tu tiempo.
Antes de pedir un préstamo para montar un negocio, ¿qué tengo que hacer?
En cualquier caso, antes de empezar a mirar préstamos para montar un negocio nuevo, desde Acierto.com te recomendamos que analices todas tus opciones y que solamente tomes la decisión si estás seguro. Esto pasará por saber si tu idea de negocio responde a una necesidad de mercado que se encuentra por cubrir o la crea, por conocer y analizar bien a tus competidores, calcular correctamente en qué costes vas a incurrir, cuál es el mercado potencial y tus posibles ventajas competitivas, si es el momento adecuado para lanzar el negocio, etcétera.
Cuando lo tengas todo claro y ya para solicitar el préstamo para montar tu propio negocio, es conveniente:
- Comparar entre los diferentes préstamos del mercado: también entre los distintos tipos de financiación a tu alcance. Para hacerlo, puedes usar el comparador de finanzas Acierto.com, donde encontrarás los mejores préstamos del mercado. El proceso, como has visto, es muy fácil.
- Tener la documentación preparada con tiempo: incluso aquella que inicialmente pueden no pedirte. Así ahorrarás tiempo.
- Contar con un detallado plan de negocio: cuanto más específico, mejor, pues te servirá para justificar ante el banco o la entidad por qué necesitas una cantidad de dinero exacta.
- No ser moroso. Si quieres montar un negocio pero estás en un fichero de morosos, por regla general lo tendrás más complicado para acceder al crédito. En cualquier caso, existen los préstamos con ASNEF.
- Cerciorarte de que podrás pagar. Esta es, quizás, la parte más importante de todas. En caso contrario, podrías verte en un aprieto.
Actualizado el 09/09/2024 por el equipo de redacción de acierto