¿Cómo saber de qué año es mi coche?
¿Cómo puedo descubrir de qué año es mi coche? ¿Puedo saber de qué año es mi coche por la matrícula? Si tienes estas dudas, podrás resolverlas en esta informativa guía. Además, te aconsejamos el seguro adecuado para tu coche, en función de su antigüedad. Si quieres contratarlo online, prueba nuestro comparador de seguros de coche. Conseguirás propuestas personalizadas, con toda la información que necesitas y nuestras valoraciones, como expertos en seguros.
Antes de enrevesar la cuestión, tenemos que dejar claro algo. La forma más fácil de saber de qué año es tu coche es consultar su documentación. El permiso de circulación es lo más parecido a su DNI.
Porque da detalles sobre el coche: señala su marca, su tipo/versión y denominación comercial. Pero también le da una identidad única a ese vehículo en cuestión, con datos como su matrícula y su número de identificación. Es en la casilla I donde encontrarás el dato que buscas: de qué año es tu coche. Es el campo reservado para la fecha de matriculación del vehículo.
Por su parte, la ficha técnica del vehículo te puede decir de qué año es tu coche, si bien no precisa mes y día, como el permiso de circulación. Solo tienes que comprobar cuándo pasó la ITV por primera vez y retroceder cuatro años atrás. Cuando adquieres un coche nuevo, no tienes que pasarla hasta que se cumplan cuatro años desde que fue matriculado.
Igual que es posible saber —aproximadamente— qué matrícula te tocará mediante aplicaciones online y consultando los ficheros de últimas matriculaciones de la Dirección General de Tráfico (DGT), también se puede conocer el dato a la inversa. Es decir, de qué año es tu coche, por la matrícula que se le asignó en su momento.
Esta consulta también se puede hacer online. Pero el resultado no siempre es preciso (puede variar en días). E incluso podría ser totalmente dispar. Y es que, teniendo en cuenta que es posible rematricular un vehículo —en casos muy concretos, eso sí—, la que le identifica no siempre refleja la antigüedad real del coche. Hablamos de aquellos vehículos cuyas matrículas provinciales han sido cambiadas por cambio de residencia del propietario, por ejemplo.
En este caso, la nueva matrícula asignada podría rejuvenecer al vehículo. Si buscáramos el dato del año de matriculación, la fecha sería posterior a la verdadera: su primera matriculación. No daría información precisa sobre el año del coche, solo de qué año es la matrícula. Entonces, ¿cómo saber de qué año es mi coche? Hay otras formas de conseguir una respuesta más precisa. Y alguna te sorprenderá.
Si no tienes la documentación de tu coche, vaya por delante este consejo: necesitas urgentemente un duplicado. Puedes hacerlo por pérdida, robo o deterioro; y presencialmente, a través de miDGT, por teléfono u online (con DNI electrónico, sistema Cl@ve y otras formas de validación digital).
Si el motivo de no tener sus papeles es que aún no es tu coche y sigues necesitando saber de qué año es —si lo vas a adquirir de segunda mano—, la forma más fácil es acudir a la DGT y solicitar un informe del vehículo. De entre todos los tipos de informe que puedes pedir para saber de qué año es tu coche te basta con el más sencillo (y, además, gratuito): el informe reducido.
Facilita menos datos que un informe completo (consignas como matrícula, marca y modelo). Pero te da la respuesta a la pregunta que te ha conducido hasta esta guía —¿de qué año es mi coche?— al aportar, también, la fecha de primera matriculación.
En este caso, saber de qué años es tu coche, no es tan sencillo como consultar una fecha en un papel. Pero sí más entretenido. Porque se trata de descifrar una suerte de código. Es el que encontrarás en la serigrafía de las lunas de tu coche: puede ser solo el parabrisas o también en las laterales y en la luna trasera.
Es un sello que prueba que las lunas están homologadas según las pertinentes normativas. Pero te dará mucha más información: nombre de la marca (normalmente representada con su logo), el tipo de vidrio, el fabricante del vidrio, el país en el que se ha expedido y otros datos. Uno de estos hace referencia a la trazabilidad del producto.
Así, entre caracteres y pictogramas que indican sus características (por ejemplo, si es antirreflectante), cuenta en qué año y mes se fabricó el cristal. Lo que puede acercarte a ese otro dato: de qué año es el coche. No es un formato de fecha al uso. Se trata de una combinación de un número (la última o dos últimas cifras del año) y de puntos (que indican el mes).
En cualquier caso, solo es una pista. No tiene por qué coincidir con el año de matriculación. Y no sirve para datar el coche, si en algún momento has hecho algún cambio de lunas.
De qué año es tu coche lo es todo para el seguro, cuando se trata de calcular la indemnización por pérdida total y por siniestro total. Si tu coche ha sido robado (y nunca recuperado), si ha perecido en un incendio o si después de un accidente no tiene arreglo (aunque se puede reparar un coche siniestro total, no siempre compensa), la aseguradora te indemnizará por su valor.
Este valor que se usa en el cálculo (de compra como nuevo, de venta o de adquisición de segunda mano) depende del año de matriculación. Lo habitual: si tiene dos años o menos, se aplica el valor de nuevo; a partir del tercer año, el valor venal (algunas, el valor venal mejorado); y a partir del quinto año, el valor de mercado.
Por eso, si tienes un coche nuevo, lo más lógico es protegerlo frente a cualquier riesgo para garantizar tu inversión y recuperarla, si algo grave le pasara al coche. Tanto por daños propios, como por robo e incendio, recuperarías su valor de nuevo. Y si es demasiado viejo, lo que te den por él no compensa una prima alta. Lo vemos en el siguiente apartado.
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Son muchas las guías que hemos escrito y que dan respuesta a esta gran duda: qué seguro debo contratar. Te hemos contado los tipos de póliza que existen. Incluso qué es una póliza. Hemos dedicado extensos artículos a explicar, por separado, en qué consiste cada modalidad. También hemos hablado largo y tendido de qué seguro necesita cada tipo de coche: eléctrico, nuevo, clásico, para jóvenes...
Si hay un denominador común en todos estos contenidos es un consejo: el seguro más adecuado para ti es el que se ajusta a las características de tu coche, en función de su valor, su antigüedad, el uso que hagas de él y otros factores. Pero también el que mejor responde a tus necesidades. Para eso está nuestro comparador de seguros de coche: para encontrar en apenas minutos las pólizas que mejor se adapten a estos parámetros. Ordenadas por precios y clasificadas por modalidad.
En cualquier caso, si tu coche tiene menos de cinco años, un seguro a todo riesgo con franquicia es lo más adecuado. O a todo riesgo sin franquicia, si quieres despreocuparte de cualquier gasto a cambio de una prima más alta. A partir del quinto año, un terceros ampliado seguirá garantizando el coche frente a riesgos graves; aunque, según el coche, las indemnizaciones pueden no compensar. Si ya está próximo a la década (o la supera) y/o no tiene mucho valor, el seguro a terceros te dará la protección necesaria a un precio mucho más asequible.
Ya hemos dedicado toda esta guía a dar respuesta a la primera cuestión del titular. Te hemos explicado cómo puedes saber de qué año es tu coche, recurriendo a diferentes vías. Pero para no dejar nada en el tintero, planteamos otras preguntas clave y les damos respuesta en esta sección.
¿Cómo sé de qué año es un coche que quiero comprar?
Puedes solicitar un informe reducido a la Dirección General de Tráfico, online o presencial. Es de acceso público y gratis. En él se informa de la fecha de matriculación del coche. Pero también, y esto resulta especialmente útil, especifica si pesa sobre el vehículo alguna incidencia que impide que pueda ser transferido a otro propietario o que pueda circular. Para obtener este informe solo necesitas un dato: la matrícula del coche en cuestión.
¿Cuánto tiempo transcurre entre el año de fabricación y el año de matriculación de un coche?
Es difícil de calcular. Puede que el coche se fabrique y tarde en ser vendido, y que haya un desfase entre el año de fabricación y el año de matriculación del coche. Actualmente, en ciertos modelos, la venta es casi a demanda: los compradores tienen que esperar para recibirlo, por lo que viene directamente de fábrica.
Además de en las indemnizaciones, ¿cómo influye en el seguro de qué año es mi coche?
La antigüedad está directamente relacionada con el riesgo que percibe y calcula la aseguradora. Determina la previsión que haga de tu solicitud de coberturas; por ejemplo, si vas a usar con regularidad el servicio de grúa por ser un coche viejo con tendencia a averiarse. Por otra parte, un coche más antiguo es un coche devaluado. Influirá positivamente en la percepción del riesgo en caso de tener que indemnizarte por pérdida total. Un coche más nuevo puede que necesite menos del seguro. Pero en el supuesto más grave, la aseguradora asume un gran coste.
Actualizado el 05/09/2024 por el equipo de redacción de acierto
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