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Excelente
9.9 / 10
Basado en 7068 opiniones
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Además, trabajamos con más de 30 aseguradoras diferentes, desde mutuas hasta compañías especializadas en seguros low cost. Un volumen de negocio que nos permite ofrecer precios únicos en el mercado. Asimismo, si contratas con nosotros, estaremos a tu lado durante todo el ciclo de vida del seguro. Entra y compara ya.
"La persona que me atendió fue muy amable y tomó el tiempo necesario para explicarme alternativas de seguros y detalles de coberturas. Me dio confianza para contratar el seguro más adaptado a lo que necesitaba."
Virginie
"Jisel ha sido súper profesional, atenta y resolutiva. En una llamada he entendido más de seguros que el tiempo que dispongo de él. Con su asesoramiento creo que hemos dado en el clavo. Gracias por la profesionalidad."
Mireia Mengual
Aunque varían según la póliza y la compañía aseguradora, estas son las coberturas más habituales en los seguros de coche a terceros:
Responsabilidad Civil (obligatoria y voluntaria)
Es la garantía mínima de un seguro a terceros básico. Gracias a ella no tienes que hacerte cargo de las indemnizaciones en caso de daños a terceros, materiales y/o personales. La Responsabilidad Civil voluntaria actúa cuando la suma asegurada en la Responsabilidad Civil obligatoria es insuficiente para pagar las indemnizaciones.
Defensa jurídica en el seguro a terceros
La cobertura de defensa jurídica nos permite contar con el respaldo económico y legal de la compañía en caso de tener que enfrentarnos a un juicio derivado de un siniestro. Como en el resto de prestaciones que cubre el seguro a terceros, la diferencia la marca la cuantía que nos ofrecen para cubrir los gastos de abogados, procuradores y costas. Es habitual, además, que la compañía aumente esta cantidad en caso de que sean ellos quienes nos proporcionen el asesoramiento y la asistencia legal, mientras que la limitan en caso de que decidamos contratar a un abogado de nuestra elección.
Rotura de lunas en el seguro a terceros
Para contar con esta cobertura deberás contratar, como mínimo, un seguro de coche a terceros con lunas. Así, no tendrás que pagar nada en caso de rotura de tus lunas delantera y trasera, tus ventanillas o tu techo solar (siempre que sea de serie).
Robo e incendio
Esta protección es la que distingue un seguro a terceros ampliado de cualquier otra modalidad a terceros. Porque es la única que la ofrece. Y no solo responde si el coche desaparece en un robo y nunca más lo recuperas o si perece en un incendio. También cubre los daños por intento de robo y los daños parciales por incendio. O si te roban o se queman accesorios de serie y extra (si los declaras).
Asistencia en viaje
La asistencia en viaje proporciona la tranquilidad de saber que serás asistido en caso de que un siniestro o avería del vehículo impida que continúes tu viaje. Así, tendrás a tu disposición un servicio de reparación in situ, si es posible, o de remolque hasta el taller más cercano. Es importante que actúe desde el kilómetro 0.
Vehículo de sustitución en el seguro a terceros
Siempre dispondrás de un coche de sustitución en los siniestros que afecten al tuyo, como un accidente, una avería, un robo o un siniestro total. Muchas compañías lo ofrecen como una garantía opcional en el seguro a terceros.
Seguro del conductor
Con esta garantía (incluida también en un seguro a terceros básico) contarás con una una indemnización en caso de invalidez absoluta y permanente o bien tu familia, si falleces en un accidente. Las pólizas más básicas limitan a 6.000 euros la indemnización por invalidez mientras que las más completas pueden llegar a ofrecer diez veces esta cantidad. Lo mismo ocurre con las cuantías por fallecimiento. El seguro del conductor también incluye asistencia sanitaria.
En el mercado actual encontramos diferentes tipos de seguros a terceros:
Hay aseguradoras que se limitan a ofrecer la cobertura mínima de Responsabilidad Civil obligatoria exigida por ley. Esta póliza nos permite circular cumpliendo la obligación de conducir con seguro, pero limita la protección del vehículo frente a múltiples riesgos como la rotura de una luna o un intento de robo. También es muy habitual encontrar seguros de coche a terceros que sumen la asistencia en viaje y el seguro de conductor.
Con los seguros de coche a terceros con lunas, la aseguradora cubre los gastos de mano de obra (para reparación y sustitución) en caso de rotura del parabrisas, la luneta trasera y las ventanillas laterales. Este tipo de seguros no varía mucho de una compañía a otra; la única diferencia radica en la extensión (o no) de la garantía al techo solar, por lo que conviene asegurarnos de que queda cubierto si tenemos un vehículo de estas características, y a las condiciones con las que nos presten este servicio
Sin llegar al nivel de protección de un seguro de coche a todo riesgo ni asumir la elevada prima que supone, los seguros de coche a terceros ampliados con robo e incendio nos garantizan la tranquilidad en estos casos. La aseguradora cubrirá los daños materiales derivados de un robo o un intento de robo y de incendio en el vehículo (total o parcial). Además, pueden incluir otras coberturas adicionales.
Algunas aseguradoras dan la posibilidad de aumentar la protección más allá de un seguro a terceros ampliado, pero sin tener que pagar por un seguro a todo riesgo. Se trata de pólizas que, además de cobertura frente a robo e incendio, ofrecen protección frente a daños propios. O, mejor dicho, ante supuestos concretos de daños propios, como el atropello de animales cinegéticos.
Contratar un seguro a terceros para tu coche suele ser recomendable a partir del tercer año de vida del vehículo. Esto es porque los seguros a todo riesgo cubren los daños propios y permiten recuperar el valor de nuevo del coche en caso de pérdida total por accidente, robo o incendio que derive en siniestro total.
A partir de entonces es recomendable contratar una póliza a terceros. Eso sí, los primeros años podemos optar por seguros a terceros ampliados para disfrutar de un nivel mayor de protección. Ten en cuenta, asimismo, que cuanto más antiguo sea el coche, más caro te costará asegurarlo, incluso a terceros.
A priori podemos decir que los seguros a terceros suelen ser más baratos que el resto de pólizas. Esto es, generalmente, porque el nivel de protección (coberturas y riesgo que asume la aseguradora) son inferiores en los seguros a terceros. No obstante, los precios pueden variar mucho según la compañía. De ahí la importancia de comparar.
Para contratar un seguro, por lo general se necesitan algunos documentos básicos, como: DNI y carnet de conducir, documentación sobre el vehículo (ficha técnica, ITV?), información de contacto actualizada, póliza anterior? Te recomendamos tener preparado todo el papeleo para agilizar los trámites.
Al contratar un seguro de coche a terceros deberías prestar atención a: nivel de protección, importes cubiertos y límites, exclusiones, coberturas incluidas sin sobrecoste, a quién cubre, en qué aseguradora se está contratando y con qué ventajas, opiniones de otros clientes, relación calidad-precio...
Siempre que cuente con la cobertura del seguro del conductor, un seguro a terceros asumirá la asistencia sanitaria y las indemnizaciones por fallecimiento e invalidez del mismo. Ahora bien, no todas las pólizas de este tipo lo hacen de serie. Pueden cubrirlo de forma opcional y con ciertos límites. Revisa siempre el condicionado o llámanos para contratar mejor.
