Tarjetas de Crédito SIN CAMBIAR de Banco
Las tarjetas de crédito de la entidad en la que tenemos nuestra cuenta corriente no siempre son las que ofrecen las mejores condiciones. Si este es tu caso, una buena alternativa puede ser recurrir a tarjetas de crédito sin cambiar de banco. Pero, ¿en qué consiste este producto de financiación? ¿Es aconsejable contratarlo? Te lo contamos todo aquí. También puedes entrar ya en nuestro comparador de tarjetas y analizar cuál es la opción que más te conviene. Fácil y rápido.
La principal característica de las tarjetas de crédito sin cambiar de banco es la que su propio nombre indica: que se pueden contratar sin tener que abrir una nueva cuenta. Y generalmente esto es posible hacerlo online, gratis y de forma prácticamente inmediata. Por lo demás, se trata de tarjetas de crédito prácticamente iguales que el resto de tarjetas de cualquier otra entidad bancaria. Con idénticas ventajas, requisitos y rasgos.
Eso sí, para solicitar una no necesitarás contratar productos vinculados (en las tarjetas de bancos tradicionales el producto vinculado es la cuenta corriente, por supuesto, entre otras cuestiones). Tampoco te pedirán que tengas domiciliada la cuenta ni que suscribas ningún otro servicio para obtener buenas condiciones.
Cómo funcionan las tarjetas de crédito sin cambiar de banco
El quid de la cuestión es entonces, ¿si no hay cuenta en el banco donde contrato la tarjeta, dónde se cargan las compras? Fácil: al solicitar una de estas tarjetas de crédito sin cambiar de banco, la entidad en que la contratemos nos pedirá un número de cuenta del que seamos titular. Sobre esta se cargarán los adeudos. Estos se harán a principio de mes o en cuotas mensuales en función de la modalidad de pago que escojas en la tarjeta de crédito sin cambiar de banco.
En definitiva, las principales características de las tarjetas de crédito sin cambiar de banco serían las siguientes:
- No tendrás que domiciliar tus ingresos ni abrir una cuenta para pedir una tarjeta de crédito sin cambiar de banco. Tampoco deberás realizar transferencias de crédito a una cuenta bancaria nueva.
- La mayoría de tarjetas de este tipo son rápidas, pueden solicitarse online y no requieren de mucho papeleo.
- Puedes vincular la tarjeta con la cuenta corriente en otra entidad.
- La solicitud es rápida porque no abres cuenta corriente, entre otras cosas.
- La emisión de muchas de estas tarjetas de crédito sin cambiar de banco es gratuita y viene aparejada a otras ventajas.
- Hay varios tipos de tarjetas de crédito sin cambiar de banco, en las que incidiremos más tarde.
Entre las ventajas principales de tener una tarjeta de crédito de otro banco distinto al nuestro encontramos las siguientes. Recuerda que pueden cambiar según el caso, pero estas son las más habituales:
- Abrirse una tarjeta de crédito en otro banco ofrece, principalmente, libertad.
- No es necesario abrirse otra cuenta.
- Los gastos se cargan en la cuenta corriente que escoge el cliente.
- Generalmente las tarjetas de este tipo tienen seguros de protección de compras, de viajes, accidentes...
- Las tarjetas de crédito sin cambiar de banco permiten pagos flexibles.
- La mayoría de tarjetas de crédito sin cambiar de banco ofrecen descuentos y cupones en diferentes comercios.
- Se pueden pedir online, de forma rápida y sencilla.
Aunque nosotros nos centramos principalmente en un tipo, existen varias modalidades de tarjetas de crédito sin cambiar de banco:
- Tarjetas de crédito bancarias: las ofrecen entidades bancarias al uso o emisores de tarjetas como American Express. Se pueden contratar online sin otro tipo de productos vinculados y son, mayoritariamente, de las que hablaremos. También hay entidades como WiZink y Bankinter Consumer Finance que las ofrecen.
- Tarjetas de crédito de comercios: hablamos de tarjetas de crédito que ofrecen comercios y grandes almacenes como El Corte Inglés, Ikea, Leroy Merlín, Alcampo, Fnac, Carrefour, MediaMarkt, Worten… Son solo algunos ejemplos. Sirven exclusivamente para financiar las compras realizadas en estos establecimientos. De ahí que no resulte conveniente usarlas como tarjetas de crédito secundarias. Además podemos descontrolar el gasto fácilmente.
Aunque no son tarjetas de crédito, encontramos otro tipo de tarjetas sin cambiar de banco muy conocidas. Recordemos que pagar a crédito significa disponer de un dinero que todavía no tenemos. O sea, que la entidad nos presta. Estas otras tarjetas sin cambiar de banco son:
- Tarjetas de fidelización: son similares a las tarjetas de los comercios, pues también las ofrecen los diferentes establecimientos. En este caso, no son tarjetas con dinero, sino monederos de cheques descuento, puntos, etcétera.
- Tarjetas prepago o tarjetas monedero: son tarjetas que no se encuentran vinculadas a ninguna cuenta corriente, sino que, como su propio nombre indica, se recargan. Pueden tener comisiones y mínimos de recarga. Se usan para pagos online para evitar pagar con una tarjeta con cuenta vinculada, pero no cuentan con demasiadas buenas condiciones ni permiten financiar las compras. En ningún momento se da el número de cuenta.
Llegados a este punto ya estás listo para solicitar tu tarjeta de crédito. Te recomendamos hacerlo a través de Acierto.com, donde podrás comparar las condiciones de las tarjetas de las principales entidades del mercado, y analizar cuál te interesa más según tu caso. Además, disponemos de un servicio de ayuda telefónica completamente gratuito para resolver todas tus dudas.
Recuerda que el proceso no acaba en el comparador (como sucede en otras entidades de la competencia) sino que te acompañamos durante toda la vida de la tarjeta de crédito. En Acierto.com estamos a tu lado.
Otras ventajas de usar nuestra plataforma son: el proceso de comparación es fácil y rápido, somos transparentes con las condiciones e independientes, ofrecemos condiciones únicas gracias a nuestro gran volumen de negocio. Puedes comparar desde cualquier dispositivo con acceso a Internet, gozamos de una gran experiencia en el mundo de las finanzas...
Actualizado el 23/04/2024 por el equipo de redacción de acierto