Casi la mitad de quienes contratan un seguro de vida lo hace para proteger a sus hijos

El 49 % de quienes firman un seguro de vida lo hacen con el objetivo de proteger a sus descendientes. Así se desprende del último estudio de Zurich Preocupaciones y retos de la crianza actual en España. El informe revela, además, que el 63 % de las familias españolas con hijos menores a su cargo ha tomado alguna medida concreta para protegerles en caso de fallecimiento. Y también, que su futuro bienestar económico es una de sus principales preocupaciones. Pero no es el único dato interesante.

La investigación sitúa al seguro de vida como producto estrella para proteger a los hijos ante el fallecimiento de los progenitores. Sin embargo, actualmente solo 1 de cada 3 familias tiene uno contratado. Además, la protección de los menores no es el único motivo para hacerlo, sino que el 26 % de las personas contratan este tipo de póliza “porque le obliga el banco al firmar la hipoteca”. 

Otras soluciones que los españoles contemplan para proteger a sus hijos en caso de fallecimiento son el ahorro a largo plazo (24 %), hacer testamento (19 %), los fondos de inversión (17 %) y los planes de ahorro a medio plazo (16 %).  

A pesar de estas medidas, el 60 % de los encuestados considera que no tendría cubiertas todas sus deudas en caso de faltar. Los datos varían en función de los ingresos familiares: el 80 % de las familias con rentas altas tendrían sus deudas resueltas, un porcentaje que baja al 63 % para las rentas medias y al 56 % para las rentas bajas. En cuanto a diferencias por género, las mujeres parecen tener mayores dificultades para dejarlas liquidadas de cara a que sus hijos no tengan deudas heredadas. 

Por otra parte, la investigación revela datos preocupantes desde un punto de vista social: el 60 % de las familias necesitan ayuda para cuidar a sus hijos. Y, de hecho, la conciliación es la principal dificultad a la que se enfrentan. En el 96 % de las ocasiones se recurre a un familiar o persona de confianza. El 4 % restante se decanta por servicios profesionales. Los abuelos son los principales cuidadores. 

Si hablamos de familias monoparentales o de padres separados, el porcentaje de familias que necesita ayuda aumenta al 70 %.

La falta de tiempo de disfrute con los hijos es, precisamente, otra de las grandes dificultades para el 40 % de los encuestados. La mayoría de ellos, además, aseguran dedicar unas escasas 3,5 horas diarias a su cuidado entre semana (el tiempo se duplica los fines de semana). Y solo el 25 % de las familias se encuentra satisfecha con la crianza de sus hijos. Aquí cabe destacar que el 69 % de las madres considera que dedican más tiempo a cuidar a sus hijos que su pareja. 

El acoso escolar y el ciberacoso, la dificultad para motivar a los hijos para que estudien o hagan los deberes, las diferencias en los criterios educativos de los centros y la exposición a pantallas también se cuelan entre las preocupaciones de los padres españoles. Aquí, como en el resto de las cuestiones analizadas, las madres tienden a centrarse en el aspecto emocional y el presente de sus hijos, mientras que los padres ponen el foco en su futuro y en cuestiones relacionadas con el rendimiento escolar. 

En definitiva: los problemas revelados por el informe de Zurich, basado en una muestra de 1.000 personas con hijos de hasta 11 años, arrojan algo de luz sobre la caída de natalidad de los últimos años. En concreto y según los datos del INE, durante el 2023 se produjo otro descenso en la natalidad, la más baja desde 2013, con 322.075 nacimientos.