Unespa alerta sobre el impacto del cambio climático en el sector asegurador
Lo hace a través de su Memoria Social del Seguro 2023, publicada recientemente
A la suma comentada hay que añadir los 453 millones de euros que abonó el Consorcio de Compensación de Seguros en materia de indemnizaciones. Y precisamente la petición de las aseguradoras va en esta dirección: quieren que el Consorcio aumente su aportación en el pago de las indemnizaciones para hacer frente a la nueva realidad climática.
“Los fenómenos de la naturaleza son cada vez más intensos, frecuentes y afectan a una extensión geográfica más amplia. Esto hace que sus consecuencias sean más dañinas para la sociedad. El seguro actúa como escudo de protección frente a estos sucesos. La colaboración público-privada es un modelo de éxito contrastado”, puede leerse en la memoria.
En cuanto a los responsables de los siniestros, los percances meteorológicos ocasionados por la lluvia son los que suponen un coste mayor, seguidos de los daños por viento, el granizo y la nieve.
Más concretamente, las borrascas Aline y Bernard –que supusieron un coste de 97 millones–, la granizada en el norte de España –91 millones de euros– y las borrascas Ciarán y Domingos –57 millones de euros– fueron las grandes responsables de este desembolso.
También hay que comentar que, mayoritariamente, estos daños se produjeron en viviendas. Por suerte y según los datos que maneja Unespa, este tipo de póliza es una de las más contratadas: en torno al 74 % de las familias españolas tienen contratado un seguro del hogar.
Ahora bien, encontramos diferencias territoriales significativas en cuanto a la penetración de esta clase de póliza. Por ejemplo, en Madrid, Barcelona, Valladolid, Navarra y Zaragoza la presencia del seguro de hogar se encuentra alrededor del 80 y 90 %. Mientras que, en Cuenca, Teruel, Ciudad Real, Lugo... Cae por debajo del 65 %.
Otro tipo de póliza, el seguro agrario, cobra relevancia ante los fenómenos adversos climáticos. Este año se han abonado hasta 1.241 millones de euros en indemnizaciones al campo, la cifra más alta de los últimos cinco años.
La sequía es el problema que genera un coste mayor al seguro: 486 millones de euros. El pedrisco se llevó 391 millones, mientras que las heladas supusieron 64 millones.
Más allá de lo comentado, la memoria de Unespa ofrece una visión global del sector asegurador con datos anuales de cada ramo. Y destaca los siguientes números por vertical: 33,4 millones coches asegurados; 21,4 seguros de hogar; 22,2 millones seguros de decesos; 21,1 seguros de vida riesgo, 9 millones de seguros de ahorro; 4,4 millones de planes de pensiones y 5.188 de viajeros asegurados en todo tipo de transportes. En total, el seguro atendió hasta 193 millones de percances el año pasado.