Los bancos encarecen los préstamos por encima del 10 %

Las entidades financieras españolas han encarecido los préstamos al consumo por encima del 10 % en un año. Así lo apuntan los últimos datos del Banco Central Europeo (BCE), que indica que han incrementado en 2,2 puntos porcentuales los tipos de interés a los que comercializan los créditos al consumo que se amortizan entre tres y cinco años. Esto supone que los préstamos han pasado del 7,96 % TAE de junio del 2022 al 10,24 % actual de hoy (superando el doble dígito).

Si atendemos a los bancos y entidades que comercializan sus créditos con tipos de interés que superan el doble dígito, encontramos Sabadell (con el tipo de interés más alto, al 19,09 %), seguido del BBVA (15,06 %), Cajamar (13,06 %), Santander (10,19 %) y Abanca (10 %).  

En el lado opuesto de la balanza se encuentran Ibercaja (3,66 %), Bankinter (6,17 %), Kutxabank (6,96 %) y Unicaja (7,39 %). Aunque hay que decir que todas las entidades financieras han encarecido el crédito entre uno y dos puntos porcentuales si comparamos la oferta con la de hace un año. 

En cualquier caso, no se puede generalizar, pues hablamos de media. Las condiciones de los créditos y préstamos dependen en gran medida de los solicitantes: situación financiera, estabilidad laboral, antigüedad en la empresa, historial crediticio general, deudas, etcétera. De ahí la importancia de comparar préstamos en distintas entidades de forma personalizada.  

El encarecimiento se produce en un contexto clave, pues las solicitudes de créditos de este tipo también se encuentran en pleno auge. ¿El motivo? Las familias prefieren pedir un préstamo antes que ajustarse el cinturón. Tal es así que principalmente los destinan a afrontar los gastos fijos y llegar a fin de mes, y a las vacaciones. 

Así y aunque los créditos al consumo también se han visto afectados por las subidas de tipos de interés, han pasado a convertirse en el catalizador de las carteras crediticias de las grandes entidades de crédito de nuestro país (versus las hipotecas, que lo eran anteriormente). La inflación y los tipos de interés más altos han provocado que los bancos a apliquen filtros más estrictos para concederlas. De ahí que estas peticiones y estas necesidades pasen a reflejarse en otros productos.